Estafas cibernéticas siguen triunfando en internet: conoce los motivos
Las estafas cibernéticas siguen triunfando en internet a pesar de que existe tanta información circulando por la red y noticias sobre este tipo de prácticas. Parece imposible pensar que alguien sea tan ingenuo para caer en una estafa por internet; sin embargo, estos delitos siguen proliferando a diario y con éxito; conoce los motivos.
Si mantenerse alerta para no caer en trampas o estafas cibernéticas en el mundo físico es un trabajo constante, para hacerlo en el mundo digital el esfuerzo es aún mayor. Estar conectados donde, cuando y con quien quieras representa un riesgo latente para nuestra seguridad, privacidad y economía. Por más inteligentes y habilidosos que seamos, los delincuentes siempre encuentran la forma de llevar a cabo sus fechorías a través de internet, desarrollando insólitas estrategias.
Los datos alertan que las estafas de herencia, compras y ventas ficticias, falsas ofertas de empleo, sorteos y loterías con engaños y fraudes de citas amorosas son los tipos de estafas que más abundan en la red.
Pero seguro que toda la información anterior ya la sabías, entonces, ¿por qué siguen teniendo éxito los fraudes cibernéticos? Especialistas en ciberseguridad nos dan algunas razones.
Estafas cibernéticas exitosas. ¿Por qué suceden?
Nos hacen seguimiento: los estafadores suelen rastrear a sus víctimas de forma online, generalmente a través de las redes sociales. Utilizan cualquier dato que esté a su disposición para preparar la táctica de ataque. Por eso, se hace tanto énfasis en ser precavidos y mejorar nuestra privacidad en este tipo de plataformas (no aceptes a desconocidos o dejes tu perfil público).
Buen discurso: tienen la capacidad de crear historias y personajes con el objetivo de engañar hasta la persona más lista. Son rápidos y aprovechan cualquier detalle o situación actual para su propio beneficio. Un ejemplo es solicitar ayuda económica por una falsa enfermedad.
Actuar sin pensar: presionan a sus víctimas para que realicen la acción deseada sin antes pensar. Este escenario se presenta generalmente cuando recibimos supuestas notificaciones sobre pagar facturas a punto de vencer o publicidades con grandes ofertas por tiempo limitado.
Palabras clave: conocen los términos más atractivos para su público objetivo “victimas” y saben que caerán rápido en la trampa. Fácil; rápido; gratis; ofertas y altos ingresos son las palabras más comunes para capturar usuarios.
Interpretar un rol de autoridad: Hacerse pasar por funcionarios públicos, abogados, dueños de empresa o expertos en cualquier área, es una de sus estrategias. Estudian al personaje a tal punto que logran interpretarlo a la perfección. Recordemos que en internet cualquiera puede ser un falso “todero”.
Usan distracciones: como hemos expuesto anteriormente, ellos no pierden ningún detalle. Si en algún momento te sientes indispuesto, estás sensible, apurado o tienes preocupaciones familiares y decides postear tus sentimientos en redes sociales, seguramente un estafador usará esa información en tu contra.
En este sentido, podemos concluir que mientras siga existiendo internet, seguirán surgiendo más y nuevos métodos para ejecutar delitos cibernéticos. Desconfiar y ser precavidos es fundamental para evitar caer en trampas. Recuerda, no todo es lo que parece, y no siempre una gran oferta es real.
¿Qué hacer para evitar una estafa cibernética?
Hay múltiples tips y recomendaciones para evitar este tipo de situaciones. Pero la regla de oro es siempre verificar que las personas o instituciones que están detrás de ofertas o productos en línea sean reales y tengan buena reputación.
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